Instrucciones de uso y mantenimiento
Las ventanas con sistemas KÖMMERLING apenas necesitan mantenimiento, además cuentan con una vida media de 50 años.
![Instrucciones de uso](/sites/default/files/styles/image_800_390/public/blog/thinkstockphotos-830679624.jpg?h=2992ba0a&itok=Frzh-DRb)
Os dejamos algunas recomendaciones que tanto el profesional como el usuario deben realizar para mantener en perfectas condiciones la ventana, alargando así su vida útil.
Por el profesional cualificado
- Cada seis meses se comprobará el funcionamiento de cierres automáticos, retenedores magnéticos, mecanismos inclinados, motores hidráulicos, etc.
- Cada año se engrasarán los herrajes con aceites para máquina de coser o vaselina.
- Cada cinco años se revisará la masilla, burletes y perfiles de sellado.
- Reparación de los elementos de cierre y sujeción. En caso de rotura o pérdida de estanqueidad de perfiles, deberán reintegrarse las condiciones iniciales o procederse a la sustitución de los elementos afectados, con reposición del lacado, en su caso.
Por el usuario
- Limpieza de la suciedad debida a la contaminación y el polvo, mediante agua con jabón neutro, aplicándolo con un trapo suave o una esponja que no raye; deberá enjuagarse con agua abundante y secar con un paño. En cualquier caso, está prohibido el empleo de abrasivos, disolventes clorados, acetona, alcohol u otros productos susceptibles de atacar la carpintería.
- Comprobación todos los años del correcto funcionamiento de los mecanismos de cierre y de maniobra. Si las ventanas no cerrasen bien, los herrajes pueden ser ajustados. Sin embargo, es conveniente que esta operación la lleve a cabo un especialista. No dude en llamar a su proveedor. En ningún caso debe usted encajar cuñas de madera o cualquier otra cosa para impedir que se abran, ya que esto podría causar serios deterioros de la ventana. En caso necesario, se engrasarán con aceite adecuado, o se desmontarán por técnico competente para su correcto mantenimiento.
Inspección (cada tres años) para detectar pérdida de estanqueidad de los perfiles; roturas; deterioro o desprendimiento del lacado, en su caso. En caso de perfiles lacados, la reparación o reposición del revestimiento deberá consultarse a un especialista.
- Cada diez años se renovará el sellado de los marcos con la fachada.
- En el caso de hojas correderas, debe cuidarse regularmente la limpieza de los raíles.
- Mantenga limpias las canaletas de recogida de aguas y los orificios de evacuación.
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